nepotismo
1 m. Tendencia a favorecer a familiares y a personas afines con cargos o premios.
2 m. Desmedida preferencia que algunos dan a sus parientes para las concesiones o empleos públicos.
Hace a penas unos diez años, los eventos internacionales que se realizaban en México eran muy, muy raros. Recuerdo el Clasificatorio Panamericano para los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 en la ciudad de Querétaro, el Iberoamericano en 2005 y ya… En esos tiempos, pensar en un Campeonato Panamericano de la especialidad o una Copa del Mundo en México era casi fantasioso, ya no se diga un Mundial Absoluto u otro evento cuya índole traspasara las barreras del continente, lo más cercano a eso era el Abierto de México o el torneo de La Loma.
De un tiempo para acá, los eventos internacionales y de interés mundial se han hecho una constante en nuestro país, lo cual es algo extraordinario, pues es una forma de que los practicantes sientan su deporte aún más cercano y se despierte un interés genuino de los no practicantes por una actividad que ha sido foco de atención en los últimos años.
Recuerdo también cuando la idea de la centralización afectaba a la organización de los eventos, cuando casi todos eran realizados en la ciudad de México, como si los otros 31 estados no existieran o no tuvieran la capacidad organizativa como para encargarles una empresa de tal magnitud.
Hoy en día, los eventos internacionales ya son una constante en territorio mexicano, pues durante esta administración, prácticamente todos los eventos se han llevado a cabo ya: Copa del Mundo, Grand Prix, Mundial Juvenil, Mundial Absoluto, Mundial de Formas, Campeonato Panamericano, Panamericano de Cadetes, Abierto de México… Incluso eventos cuya organización y sede no depende enteramente de la Federación, como son Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del Caribe. Quizá el único evento que hace falta en México para terminar el all-around de taekwondo son unos Juegos Olímpicos, pero puede que varios de nosotros no vivamos para ver eso suceder.
La mayoría de los eventos internacionales realizados sobre suelo nacional habían gozado de una amplia variedad de sedes, lo que es muy bueno para el país, pues es una forma de promocionar a la República Mexicana en el extranjero y que el mundo se pueda dar cuenta de que México es mucho más que el Distrito Federal. Un ejemplo claro de esto fue el mundial del 2013: la primera idea era realizarlo en la Ciudad de México, el palacio de los deportes sería el marco del evento, sin embargo, al final se optó por hacerlo en Puebla y ese campeonato es uno de los mejores que se recuerdan en cuanto a escenario, organización y todo lo demás… No digo que no se hubiera conseguido el mismo resultado si se hacía en el D.F., claramente se hubiese alcanzado, pero hacerlo en otro estado, en mi opinión, resulta bastante benéfico para todos.
A pesar de la variedad de sedes, todo este tiempo se notaba una tendencia que se fue haciendo más fuerte el año pasado y que este año fue más evidente que la aleta dorsal inclinada de una orca en cautiverio: Aguascalientes y Querétaro. El año pasado, muchos de los eventos internacionales se realizaron entre estas dos ciudades. Este año, la gran mayoría de los eventos (Nacionales e Internacionales por igual) serán realizados sólo en la capital del estado hidrocálido.
No es que tenga yo un problema con Aguascalientes, todo lo contrario, es una ciudad hermosa. Mi problema es con la centralización. El hecho de no hacer eventos en el D.F., pero hacerlos todos en alguna otra ciudad, sin variación alguna, no es descentralización, es sólo centralizar en otro lugar.
Ahora bien, ¿qué tiene de malo que todos los eventos se hagan en una ciudad específica? Bastante, verán: hay un refrán que dice que en la variedad está el gusto. Si acostumbramos a la población de un lugar específico a que siempre haya eventos de alto impacto (Llámense torneos internacionales de taekwondo o balaceras a media calle), los eventos dejan de ser de alto impacto y se convierten en sucesos normales, lo cual les quita espectacularidad en la psique de la población y el resultado es el que vimos en el clasificatorio a Juegos Panamericanos que se acaba de realizar allá: poca audiencia, las gradas semi-vacías, cuando, y puedo apostar un huevo, a que el auditorio hubiera estado lleno si se hubiera realizado el evento en cualquier otro sitio.
¿Por qué Aguascalientes? Bueno, han demostrado que su capacidad organizativa está a la par de cualquier estándar internacional… Quisiera que la respuesta fuera así de simple, pero desgraciadamente hay algo más: Aguascalientes es la ciudad de origen y actual residencia del Presidente de la Federación. Sabiendo esto, automáticamente las cosas toman una dimensión más oscura.
¿Culpa del Presidente? Pues no, al menos no del todo. Él no es quien decide las sedes (O no debería, pero todo es posible aquí en Wonderland). A nivel panamericano o mundial, existe un concejo que se encarga de analizar las propuestas y votar por el país que organizará tal o cual evento. El concejo elige al país, a su vez, el país elige la ciudad que albergará el evento.
¿Cuál es el proceso de selección para la sede dentro del país? En cualquier país no-bananero del mundo, existiría igualmente un concejo que elegiría la ciudad basándose en algún(os) criterio(s) definido(s). ¿Existe dicho proceso en México? ¿Existe dicho concejo? ¿Existen dichos criterios? No sabemos… Y conste que se lo pregunté directamente a la Federación:
La verdad es que no sé si exista realmente el término “nepotismo geográfico”, pero no se me ocurrió (O no sé si exista) otra terminología para nombrar la situación que describo en el post. Podría ser también un problema de nacionalismo un poco más localista: todo para mi estado, todo para mi ciudad. Quién sabe.
Yo les recomendaría, así de cuates, que cambiaran de sede lo más posible. Todo por salud mental del público y de los atletas… Aunque quizá sean estos últimos los que menos importan a la hora de la toma de decisiones. Lástima.
Por cierto, hablando de sedes y esas cosas: el Panamericano Junior y de Cadetes de este año lo tenía confirmado Colombia desde hace un año… Ya se arrepintieron, o se quedaron sin plata, que es lo mismo. El problema es que faltan sólo tres meses, ¿quién será el caballero de reluciente armadura que aparezca para salvar el día? Corren las apuestas…
EN EL CAMINO
El día de hoy me enteré de que el señor Kristopher Moitland de Costa Rica ha anunciado oficialmente su retiro de las áreas de competencia. Buen amigo, gran competidor y mejor persona. Te deseo lo mejor en esta etapa que terminas, pero sobretodo en la que está por comenzar. Es gusto haber pertenecido a una misma generación.
FE DE ERRATAS
En el semanario anterior dije que el primer Clasificatorio a Juegos Panamericanos de la historia había sido en Cali, Colombia, lo cual es una información imprecisa. En efecto fue el primer clasificatorio a Juegos Panamericanos que reunió a todos los países interesados, pero no fue el primero en sí: para los juegos de 2003 hubo un clasificatorio para países sudamericanos en Santa Cruz, Bolivia. Para esos mismos juegos, México, Estados Unidos y Canadá clasificaban directo, la razón es que la organización de los Juegos daba el mismo número de plazas para Norteamérica y para Sudamérica, sólo que en el Norte nada más hay tres países. Hasta el día de hoy, no sé cómo le hicieron los países de Centroamérica para clasificar, si alguien sabe, por favor compártanos. Agradezco al señor Mayko TKD por la aclaración.
Igualmente en el semanario anterior dije que Edna había sido “olvidada en el aeropuerto”. Lo cual fue desmentido por la misma Edna. Agradezco la aclaración también:
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